Había interés por saber cómo llevaría la resaca copera el CD Cazalegas-Ebora Formación; algo que duraría apenas cinco minutos, los que transcurrieron desde el pitido inicial hasta que Víctor Meneses enganchara desde fuera del área un disparo raso que se colaría por la derecha de Arturo para hacer el 1-0. Sin embargo, el gol tempranero no significó necesariamente un partido cómodo para los cazalegueños.
A la cita acudían los naranja con alguna que otra baja; la consabida de Alonso, por sanción. La de Diego Prado, pendiente todavía de la evolución de su lesión de rodilla y de una decisión definitiva al respecto. Y la de Borja Escoredo, tocado durante la semana y que tampoco sería de la partida. A éstas, se le uniría a la hora de partido la de Barrientos, que veremos qué alcance tiene.
La primera parte no deparó excesivas ocasiones de peligro Si acaso un intento aislado de los locales que terminaría con Alfre Ramos rematando en semifallo un centro de Álvaro Gil. Muy poca producción para un equipo acostumbrado a llevar el peso del partido y a crear ocasiones que vio poco a poco como se diluía en su juego, casi siempre perdedor en los balones divididos y con cierta pérdida del control del juego durante la segunda parte de la primera mitad.
Todo ello, unido a cierta falta de contundencia atrás, propició que un balón suelto al borde del área tras una buena contra terminara con Caste cruzando desde el borde del área a Machuca, que no pudo detener el disparo que se convertiría en el gol del empate (1-1). Con la igualada en el electrónico llegó el entreacto y la parroquia local se preparaba para el segundo tiempo con el recuerdo de haber presenciado algo muy parecido en el último partido de liga en casa.
Al poco de iniciarse la segunda mitad, un contratiempo en forma de lesión se cruzaba en la disposición del equipo para Rubén Pulido; Barrientos, imprescindible para el técnico, se retiraba visiblemente lesionado dejando su puesto para el juvenil Tesoro, lo cual venía a demostrar dos cosas: una, que a Rubén Pulido no le tiembla la mano a la hora de dar entrada a los jóvenes valores; dos, que la cantera naranja puede dar muchas alegrías a la entidad.
Y sería precisamente una entrada por banda derecha de Tesoro, que tuvo una actuación muy destacada durante la media hora que jugó, la que terminaría con un centro raso que embocaba a puerta Alfre Ramos en la más pura expresión de remate de delantero centro (2-1). A media hora para el final, volvía cierta tranquilidad a la afición local.
Lejos de conformarse y echar el freno de mano, esta vez el CD Cazalegas-Ebora Formación fue a por la sentencia para no andar luego con posibles lamentos. Y así, Víctor Meneses hasta en dos ocasiones y el capitán Rubén Rivera pudieron poner el tercero sin suerte de cara a la puerta contraria. Por el camino, tremendo susto a la salida de un córner sacado por bajo y que se paseó por delante de Machuca sin encontrar milagrosamente la red.
El empeño cazalegueño tendría su recompensa cuando tras una brillante internada de Crespo por la izquierda su centro era rematado de cabeza por Alfre Ramos; el rechace del portero era recogido por el propio delantero naranja para fusilar a Arturo y llevar la tranquilidad al marcador (3-1). Dicha tranquilidad pasó a ser la sentencia cuando un minuto después Rubén Rivera ponía un caramelito a media altura para que el propio Alfre Ramos, al borde del área pequeña y de vistosa chilena, rubricara con su hat trick una victoria local que ya no se escaparía (4-1).
Con el marcador tan en franquicia, aprovechaba Rubén Pulido para mover banquillo y dar descanso, otorgando minutos a Ferrer y a los jóvenes Diego Sánchez y al juvenil Álvaro Fernández. La temporada avanza y entre lesiones y sanciones, todos los jugadores de la primera plantilla y los juveniles que están en dinámica de primer equipo van a ser importantes.
En siete días, visita a campo del segundo clasificado, el CD Villa, del que le separan cuatro puntos y un partido menos a favor del cuadro cazalegueño; sin duda, uno de los grandes partidos de lo que va de temporada.
